¿Qué es un ERTE y cómo te afecta?
Entrar en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) puede ser como entrar en un limbo laboral. De repente, te encuentras en una situación donde no estás trabajando activamente, pero tampoco estás despedido. La incertidumbre es palpable: ¿volveré a mi puesto? ¿Cuánto durará esto? Y la pregunta que carcome a muchos: ¿me pueden echar estando en ERTE? Vamos a desentrañar este laberinto legal para que sepas a qué atenerte y cuáles son tus derechos.
¿Qué es Exactamente un ERTE? Desmitificando el Expediente
Un ERTE, o Expediente de Regulación Temporal de Empleo, es una medida que las empresas pueden tomar cuando atraviesan dificultades económicas, técnicas, organizativas o de producción. En lugar de despedir a sus empleados, la empresa solicita a la autoridad laboral la autorización para suspender temporalmente los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral. Piensa en ello como una especie de «hibernación» para la relación laboral.
Durante este periodo, los trabajadores afectados pueden cobrar la prestación por desempleo (si cumplen con los requisitos) y la empresa se ahorra los costes salariales. El objetivo principal es evitar despidos definitivos y permitir que la empresa se recupere y vuelva a contratar a sus empleados cuando la situación mejore.
Pero, ¿qué tipos de ERTE existen? Básicamente, hay dos:
* ERTE de Suspensión: El contrato de trabajo se suspende por completo. No trabajas y, si cumples los requisitos, cobras el paro.
* ERTE de Reducción de Jornada: Sigues trabajando, pero con una jornada laboral menor a la habitual. Cobras por las horas trabajadas y, si cumples los requisitos, también cobras una parte del paro para compensar la reducción de tu salario.
¿Es Legal Despedir a un Trabajador en ERTE? La Delgada Línea Roja
Aquí es donde la cosa se pone interesante. En principio, no, no es legal despedir a un trabajador durante un ERTE por las mismas causas que motivaron el ERTE. Es decir, si la empresa te metió en un ERTE por dificultades económicas derivadas de la pandemia, no puede despedirte alegando esas mismas dificultades mientras el ERTE esté vigente. Sería como usar la misma excusa dos veces, ¡y eso no cuela!
Sin embargo, la ley tiene sus recovecos, y existen algunas excepciones:
* Despido Disciplinario: Si el trabajador comete una falta grave (por ejemplo, robo, acoso, insubordinación), la empresa puede despedirlo disciplinariamente, incluso estando en ERTE. Es como si te pillaran con las manos en la masa, independientemente de si estás trabajando o no.
* Despido por Causas Objetivas Distintas a las del ERTE: La empresa podría despedir al trabajador por causas objetivas diferentes a las que motivaron el ERTE. Por ejemplo, si la empresa se reestructura y elimina un departamento completo (y tu puesto está en ese departamento), podrían despedirte, aunque estés en ERTE. Pero ojo, la empresa debe justificar muy bien estas causas y demostrar que son independientes del ERTE.
* Finalización del ERTE y Despido: Una vez que el ERTE finaliza, la empresa recupera su capacidad de despedir por las causas legalmente establecidas. Esto no significa que te vayan a despedir automáticamente, pero sí que la protección especial que te brindaba el ERTE desaparece.
El Compromiso de Mantenimiento del Empleo: ¿Una Promesa Real?
Muchas veces, los ERTEs vienen acompañados de un «compromiso de mantenimiento del empleo». Esto significa que la empresa se compromete a mantener el empleo de los trabajadores afectados durante un cierto periodo de tiempo (normalmente 6 meses) después de la finalización del ERTE. Este compromiso es una condición para que la empresa reciba ciertas ayudas públicas.
Pero, ¿es una promesa que se cumple siempre? Lamentablemente, no. El incumplimiento de este compromiso puede acarrear sanciones para la empresa, como la devolución de las ayudas recibidas. Sin embargo, esto no garantiza que vayas a mantener tu puesto de trabajo. La empresa podría optar por pagar la sanción y despedirte igualmente.
## ¿Qué Hacer si te Despiden Estando en ERTE? Tu Plan de Acción
Si te encuentras en la desafortunada situación de ser despedido estando en ERTE, lo primero es mantener la calma y actuar con cabeza. No te dejes llevar por la rabia o la frustración, y sigue estos pasos:
1. Revisa la Carta de Despido: Lee detenidamente la carta de despido y asegúrate de entender las razones que alega la empresa para despedirte. ¿Son las mismas que motivaron el ERTE? ¿Son causas objetivas justificadas? ¿Se cumplen los requisitos legales para el despido?
2. Firma «No Conforme»: Si no estás de acuerdo con el despido, firma la carta de despido como «no conforme». Esto te permitirá impugnar el despido posteriormente. Si firmas «conforme», estarás aceptando el despido y renunciando a tus derechos.
3. Calcula tu Indemnización: Calcula la indemnización que te corresponde por despido improcedente (si el despido no está justificado) o por despido objetivo (si el despido está justificado, pero no estás de acuerdo con las causas).
4. Consulta con un Abogado Laboralista: Busca el asesoramiento de un abogado laboralista lo antes posible. Un abogado te ayudará a evaluar tu situación, a determinar si el despido es legal o no, y a preparar una posible demanda.
5. Presenta una Papeleta de Conciliación: Antes de presentar una demanda, debes presentar una papeleta de conciliación ante el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC) de tu comunidad autónoma. El objetivo es intentar llegar a un acuerdo con la empresa antes de ir a juicio.
6. Presenta una Demanda: Si no